La puerta de entrada de Hungría, una de las ciudades más bellas de Europa, cuyo centro histórico junto al Danubio, fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.
El Danubio,  divide Budapest en dos partes que son las que dan nombre a la ciudad: Buda y Pest.  

Recorriendo Buda
Quienes hagan el recorrido por su cuenta a pie, pueden iniciarlo tomando el funicular que parte de la Plaza de Adam Clark, donde está el Kilómetro O junto al Puente de las Cadenas y sube hasta el Palacio Real.
También es éste un buen lugar para apreciar la singular panorámica de Budapest . Aquí, los viejos edificios, testigos de un pasado glorioso, se muestran en todo su esplendor. Algunos de ellos han sido escenario de sucesos históricos que conmovieron a Europa. Es el caso, por ejemplo, de la Iglesia de Matías: aquí fueron coronados muchos de los reyes húngaros, y los últimos gobernantes de la dinastía de los Habsburgo, el emperador Francisco José y su esposa Isabel (Sissi)  y Carlos IV.  La iglesia de Matías --que no lleva el nombre de un santo, sino un gobernante: el rey Matías Corvino, es el corazón del Barrio del Castillo, y éste el centro de Buda. Es uno de los lugares más románticos y bellos de Budapest. Casi cerrado al tráfico, es un sitio perfecto para pasear contemplando sus bellas muestras de arquitectura y arte o para hacer un alto en alguno de sus buenos restaurantes y agradables terrazas.
Cerca del Palacio se encuentra la Plaza Dísz, antigua plaza del mercado y en cuyos extremos aún se observan los restos de las antiguas puertas de la ciudad. Las sinuosas callejuelas y los estrechos edificios que abundan en todo el barrio son vestigios de la Edad Media. Los elegantes palacios barrocos y rococó proceden de la época posterior a los turcos.   Puntos claves del recorrido por el Barrio del Castillo son la Plaza de la Santísima Trinidad, el Bastión de los Pescadores, la Iglesia de María Magdalena, el Museo de Historia Militar y,  el Palacio Real, que hoy alberga numerosos museos, como el Museo de Historia de Budapest y la Galería Nacional Húngara.

Paseando por Pest                                                                      El grandioso Parlamento, construido con una mezcla de estilo ecléctico, neogótico, renacentista y barroco es uno de los mayores edificios del mundo que funciona como parlamento.

Pest, la antigua ciudad medieval, posee la chispa y la vivacidad de París. Las animadas calles peatonales, la Plaza Vörösmarty, lugar de cita de los artistas ambulantes, recuerda la atmósfera de Montmartre. En esta plaza, auténtico corazón vital de Pest están dos de los cafés más concurridos: el viejo Gerbeaud y el moderno Art Café.  Si se quieren hacer compras tradicionales, vale la pena acercarse al Mercado Central.                                                     La Plaza de los Franciscanos donde se construyeron los dos palacios Klotild, es otra de las tantas a conocer.
El antiguo barrio judío también merece una visita. La Sinagoga, con capacidad para 3.000 personas, es la mayor de Europa y la segunda del mundo. Se halla anexo el Pabellón de los Héroes y el Monumento a los Mártires Húngaros, erigido en 1991. Andrássy es la primera avenida elegante de la ciudad, trazada a finales del siglo pasado. Empieza como una ancha calle de altos edificios de vecindad, convirtiéndose paulatinamente en una alameda bordeada de palacetes y jardines. Uno de los edificios más importantes de Andrássy es el Palacio de la Ópera Nacional Húngara 

La avenida Andrássy acaba en la Plaza de los Héroes, la mayor de la ciudad, en la que se encuentra el gigantesco Monumento al Milenario con grandes estatuas en torno a la columna central coronada por el arcángel Gabriel, que representan a los jefes de las siete tribus que condujeron a su pueblo desde los Cárpatos hasta Hungría en el año 896. A ambos lados se encuentra el Museo de Bellas Artes.

Muy cerca está el Parque Municipal, donde encontramos el Parque Zoológico y el Botánico, el Gran Circo y el Parque de Atracciones, el Castillo de Vajdahunyad,

Budapest es la capital de los baños tremales.  
Algunos de los famosos balnearios públicos en Budapest:
   - Balneario Gellért
   - Balneario Széchenyi
   - Balneario Lukács
   - Balneario Rudas
   - Balneario Király
   - Balneario Rác